Pensar en ti, es como una divina tentación que le da luz a mi vida y alimenta mi corazón. Pensar en ti, es como bañarme con agua bendita como cantar una oración combinada con una canción de amor... Amarte a ti, querido ángel, es como un bello pecado del cual no podemos escapar pues estamos enamorados...
Cuando la inspiración me ataca, me encontraré escribiendo en éste mi diario de historias alternas